La palabra más soez y la carta más grosera son mejores, son más educadas que el silencio. votos 3
No quiero hacer nunca nada mediocre. Oigo la música en las listas, y no quiero ser grosera, pero esas personas no tienen alma votos 3
Nada hay tan difícil como la franqueza, ni nada tan fácil como la adulación. La adulación es agradable, y todos la escuchan con cierta delectación, con una delectación grosera quizá, pero delectación al fin votos 3